Sabado 03 de noviembre del 2007Brutal represión contra estudiantes de la UCLA 
La autonomía universitaria, lograda con innumerables luchas estudiantiles en la historia venezolana, vivió ayer un día realmente penoso. En una acción contundente y sin mediar palabra, un fuerte contingente de la Policía de Lara dispersó, con bombas lacrimógenas y perdigones, una manifestación pacífica contra la reforma constitucional protagonizada por estudiantes larenses totalmente desarmados.
En forma espontánea, un numeroso grupo de estudiantes de Medicina y Enfermería de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), salieron a protestar por la aprobación de la reforma en la Asamblea Nacional y decidieron cerrar, sólo por una hora, el tránsito por la avenida Libertador, una de las principales arterias viales de la ciudad. Ninguna organización o asamblea precedió tal manifestación.
Los jóvenes se encontraban con banderas y cantando sus consignas contra la propuesta de reforma, estaban pacíficos y sin ninguna intención de alterar el orden público. Allí, fueron abordados por los representantes de los medios de comunicación social, quienes presenciaron todos la protesta y los sucesos posteriores en su totalidad.
Alrededor de las doce y cuarenta de la tarde, un fuerte contingente de efectivos policiales arremetieron contra la manifestación, con bombas lacrimógenas y disparando perdigones contra la humanidad de los estudiantes que corrían hacia el decanato con sus manos en alto e incluso se arrodillaron entonando el Himno Nacional.
Algunos jóvenes decidieron responder con piedras y palos a tal agresión, luego se refugiaron en su universidad, amparados por el principio legal que establece la inviolabilidad del recinto universitario, pero la realidad fue muy distinta. Aunque algunos señalaron el breve ingreso de un motorizado, lo que sí se pudo comprobar fue la actuación de los cuerpos de seguridad en este sentido.
Pese al conocimiento de las legislaciones vigentes, los contingentes policiales se apostaron en la cerca perimetral del Decanato de Medicina y, desde allí, continuaron los lanzamientos de lacrimógenas y perdigones al interior del recinto, sin considerar su protección constitucional, incluso algunos funcionarios apuntaron sus escopetas de perdigones hacia el decanato arrinconando a personas que se encontraban adentro con las manos levantadas, mientras otros seguían respondiendo con las piedras que conseguían.
Las autoridades de la UCLA se reunirán para analizar la situación, pero el rector Leone denunció la violación al recinto y clamó por la inmediata corrección de este tipo de actitudes. El consejo se reserva las acciones legales que tengan lugar.
"Cobardes, cobardes"
La indignación de los estudiantes se vio realmente desbordada. Desde el interior de su universidad, aún eran asediados y gritaban "cobardes, cobardes", "vayan a buscar malandros" ó "hay que estudiar, hay que estudiar, el que no estudia a policía va a parar". Los efectivos se mantuvieron por varios minutos en la cerca perimetral, además se estacionó el vehículo conocido como la ballena frente a la puerta del decanato.
Autoridades del decanato y docentes salieron a dialogar con la policía, mientras personal de seguridad de la UCLA cerró el recinto con cadenas para resguardar al estudiantado. Las actividades fueron suspendidas.
Bernaind Castellanos, presidente del Centro de Estudiantes, consideró que quedó demostrada la irritación de los cuerpos de seguridad, en vista de la visita presidencial prevista para ayer, con una protesta estudiantil.
-Decidimos trancar la avenida por una hora, a sabiendas de las salidas alternas que existen para el tránsito. Al visitante de Miraflores, no le conviene que haya movimiento en la calle, por eso nos reprimieron en esta forma tan salvaje y queremos denunciar que ellos se replegaron, porque autobuses llenos de estudiantes chavistas vienen a agredirnos.
"Vamos a seguir aquí, pues comenzamos de una forma pacífica, pero no aceptamos represión. Es mentira que haya existido una mediación previa con los estudiantes, porque esta acción fue espontánea emprendida por 145 estudiantes, lo decidimos a las once y media de la mañana. No estábamos haciendo nada, parece ser que al Presidente le molesta que gritemos nuestras consignas, ahora no podemos hablar ni aplaudir. Hemos hecho muchas manifestaciones en Lara y nunca nos habían tratado así, casualmente cuando viene el Presidente. No nos vamos a callar y la dignidad de los estudiantes no se calla".
Decano al frente
José Francisco Guirnaldo, decano de Medicina y Enfermería, estuvo junto a sus estudiantes en todo momento y trató de negociar para resguardarlos. De hecho, ordenó el cierre total de las puertas.
"Los muchachos decidieron manifestar por pocos minutos, llegó la policía y sin mediar, llegaron agrediendo con bombas y perdigones. Salí a hablar con el comandante, le manifesté que, en otras oportunidades, hemos conversado cuando ha venido la Guardia Nacional y se ha llegado a feliz término.
Él, en forma irreverente y sin ningún tipo de diálogo, me dijo que daba cinco minutos para que desalojaran la calle y sino iban a proceder a agredirlos. Yo le dije que asumiera su responsabilidad, tendrán que asumir las consecuencias por introducir gas lacrimógeno al decanato y han disparado, aunque no entraron. Evidentemente, nos agredieron adentro, aquí perdemos todos, jamás debimos llegar a esto".
Comandante en el sitio
Octavio Chacón, comandante de las FAP-Lara, se apersonó en el sitio y aseguró que dos efectivos policiales fueron heridos, ante los medios presentes desde el inicio de las acciones.
-Esto estaba previsto desde el día de ayer, se habló con los dirigentes estudiantiles, porque trancaron una arteria importante de la ciudad y cortaron en libre tránsito al que tienen derecho todos los ciudadanos de este país.
"Estas acciones se hacen normalmente, cuando se trata de vías como la Libertador, la cual, al ser trancada, provocan el colapso de la ciudad", dijo negando que la visita del Presidente Chávez haya tenido que ver en sus órdenes.
Al ser consultado sobre las causas que motivaron los disparos de bombas y perdigones al interior de la universidad, respondió tajante: "Eso fue en la calle, no hay ningún policía dentro del recinto, a ellos se les dijo que no trancaran la calle y aquel estudiante que esté al margen de la Ley, bueno, se tomarán las acciones contundentes y correspondientes".
-La autonomía universitaria es de "la puerta para adentro". Los perdigones plásticos fueron lanzados fuera del recinto, hay dos funcionarios heridos y trasladados al Hospital, por eso se usaron las armas de protección porque arremetieron contra los funcionarios policiales.
"Las órdenes es mantener las vías totalmente abiertas para el uso y disfrute de los ciudadanos", finalizó.
Protesta rectoral
Al conocer los hechos, Francesco Leone, rector de la UCLA, aseguró haber sostenido conversaciones con la Gobernación de Lara y se mostró sumamente indignado por lo que calificó como "una violación notoria al recinto universitario".
"Quiero manifestar mi más enérgico rechazo a la actuación de la Policía en el Decanato de Medicina, esto es una violación al recinto universitario, protegido en la Constitución Nacional y el artículo 7 de la Ley de Universidades. Nuestros estudiantes fueron agredidos y exigimos el respeto a la pluralidad de las ideas".
Yo lo exijo a las autoridades, expresó enardecido, que se garantice el derecho que los ciudadanos tenemos a protestar pacíficamente, porque esto también atenta contra la libertad de expresión de los ciudadanos. Expreso mi repudio total y el Consejo Universitario se pronunciará, a fin de tomar las acciones correspondientes.
"No creo que el Presidente de la República, con su sensibilidad social, esté de acuerdo con estas situaciones, en verdad no lo creo".
Se conoció que la Dirección de Seguridad de la UCLA elaborará un informe detallado de los hechos, el cual será presentado al rectorado. Trascendió también que la acera aledaña al Decanato de Medicina, es considerada como un predio universitario, así como todos sus accesos, por lo cual estaría amparada bajo el principio de autonomía.
Desde las rejas, los uniformados accionaron dispositivos contra el estudiantado sin ninguna contemplación.
Jaimet Cristina Prato
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